sábado 29 de marzo / 21:00
Bloodstein no es el apellido de una larga saga de vampiros sanguinarios, tampoco el nombre de una exclusiva marca de relojes suizos. Detrás él tampoco hay un gran despliegue mediático, ni una junta directiva que trata de generar el nuevo sonido del verano o una estrategia de marketing perfecta. En realidad está solo Carlos, que desde el año 2020 se pelea contra viento y marea para sacar adelante una música cargada con la solvencia de quien apuesta y trabaja en lo que cree.
Entre el punk DIY y el gusto por el pop, Bloodstein ocupa un espectro capaz de llevarte desde de la quema de contenedores en la vía pública a la declaración de amor más sincera que nunca nadie le dedicó a su propia madre. Porque Carlos es todo ternura, pero también compromiso.